Representantes de los ministerios de Relaciones Exteriores y del Interior comparecieron este jueves en el programa televisivo Mesa Redonda para debatir sobre las actualizaciones realizadas a la política migratoria cubana, el flujo irregular de migrantes, las salidas ilegales del país, y la atención consular en la etapa de pandemia.
Al inicio de la Mesa Redonda, Johana Tablada de la Torre, subdirectora de la Dirección General de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores, se refirió al reciente informe de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) en el que se descarta la participación de potencias extranjeras en los incidentes de salud que han sufrido funcionarios diplomáticos estadounidenses en legaciones en el exterior.
La diplomática cubana manifestó habría que preguntarse por qué la CIA decidió filtrar en estos momentos una información que hace mucho tiempo saben que es cierta.
Este informe confirma lo que ha dicho el grupo de expertos de Cuba desde que se iniciaron las investigaciones en nuestro país sobre el supuesto ataque acústico a los funcionarios estadounidenses en La Habana, sentenció.
Tablada explicó que en las investigaciones participaron científicos, médicos, expertos del Ministerio del Interior y de diversas entidades.
No se pueden atribuir a una causa común, mucho menos a una hipótesis tan descabellada y extravagante como la existencia de un ataque deliberado, la cantidad de síntomas heterogéneos que se reportaron para identificar el malestar de los funcionarios, dijo.
Debe destacarse que existían enfermedades reales, algunas prexistentes, otras que se produjeron o se pudieron haber producido en algún lugar en La Habana o en algún otro destino en el exterior, añadió.
“Lo que sí es claro y se ha demostrado una y otra vez es que no existe evidencia científica alguna que concilie la teoría de los ataques en todas sus denominaciones, acústicos, sónicos, infrasónicos, microondas”.
Fue con el pretexto de que se produjeron ataques, de que cualquier malestar que sufrieron los funcionarios estadounidenses fue producto de una acción deliberada contra ellos, que se cierra el Consulado de EE.UU. en La Habana, y que se comienzan a desarrollar contra Cuba, con impacto directo en nuestra población, un grupo de medidas dirigidas a dinamitar la relación bilateral EE.UU.-Cuba, y revertir el proceso de mejoría de las relaciones impulsado por el General de Ejército Raúl Castro y el presidente Barack Obama, señaló.
Recordó que el 29 de septiembre de 2017, el Departamento de Estado anunció la decisión de reducir drásticamente su personal diplomático y consular y suspender los servicios migratorios y consulares.
La noticia falsa de los ataques fue lo que provocó que se tomaran medidas que atentaron contra los viajes de cubanos a EE.UU. Cuba fue el único país sancionado, entre una decena de países en los que también se reportaron incidentes de salud de los funcionarios estadounidenses. Se tomaron medidas muy duras con impactos muy dañinos en la población y en los cubanos residentes en el exterior, sentenció.
Por su parte, Ernesto Soberón Guzmán, director general de asuntos consulares y atención a cubanos residentes en el exterior del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, se refirió a las características de la política migratoria cubana en la etapa de pandemia, periodo en el que se han implementado medidas para facilitar a los cubanos los viajes y los trámites migratorios.
En ese sentido, explicó que los consulados de Cuba han tomado medidas para continuar trabajando, ya sea en formato presencial o a distancia, se mantienen vigentes las decisiones de permitir la entrada al país de los cubanos con pasaportes vencidos y que puedan actualizarlos acá, y la de extender a más de 24 meses el tiempo de estancia en el exterior de los ciudadanos cubanos.
Las sucesivas actualizaciones de la política migratoria cubana desde el año 2013 a la fecha han buscado facilitar los viajes de los cubanos en ambos sentidos (desde y hacia Cuba), como parte también de la política nacional de fortalecimiento de los vínculos con los cubanos residentes en el exterior, sostuvo.
El gobierno de Cuba ha reiterado el compromiso de garantizar una migración ordenada y segura, y con ese propósito ha sostenido periódicamente rondas de conversaciones migratorias con diferentes contrapartes, en aras de establecer mecanismos de cooperación eficaces en temas consulares y migratorios en general, y que, al mismo tiempo, permitan establecer alianzas para combatir flagelos internacionales como el tráfico ilegal de migrantes y la trata de personas, ambos asociados al flujo irregular de migrantes.
Incluso en época de pandemia hemos mantenido la realización de estas rondas de conversaciones migratorias utilizando la modalidad virtual, afirmó al especificar que desde 2019 a la fecha se han realizado 25 encuentros de este tipo, la mayoría con países de América Latina y el Caribe.
Cuba cuenta con nueve acuerdos migratorios bilaterales firmados y, en el ámbito multilateral, ratificó su participación en el Pacto Global para una Migración Segura, Ordenada y Regular.
Soberón ratificó que Cuba continúa promoviendo un mayor acercamiento con los cubanos residentes en el exterior. Entre 2020 y 2021 se organizaron alrededor de 90 vuelos charter para retornar a Cuba a miles de ciudadanos que se encontraban varados en el exterior debido a la pandemia.
El funcionario de la Cancillería cubana manifestó que, a pesar de los esfuerzos de la Isla por facilitar los viajes internacionales en un sentido u otro, por garantizar los flujos migratorios regulares y ordenados, por garantizar una atención consular lo más eficiente y eficaz posible, la realidad es que el gobierno de EE.UU. ha incumplido con los acuerdos migratorios firmados con Cuba, y en su lugar ha adoptado un grupo de medidas que obstaculizan los viajes entre ambos países.
Esta situación y el reforzamiento del bloqueo económico, comercial y financiero contra nuestro país, constituye un incentivo a la migración irregular de los ciudadanos cubanos, que no solo afecta a Cuba y a EE.UU., sino también a terceros países, agregó.
Alertó que los ciudadanos cubanos que participan en los flujos irregulares de migración, ya sea por tierra o por mar, se convierten muchas veces en víctimas de los grupos delincuenciales que en la región se dedican al tráfico de migrantes y la trata de personas. El gobierno de EE.UU. en cierta medida es responsable y es cómplice de la suerte que corren esas personas, denunció.
Se mantiene movimiento migratorio ordenado de cubanos residentes y en el exterior
Al intervenir en la Mesa Redonda de este jueves, el jefe de la Dirección de Identificación, Inmigración y Extranjería del MININT, el coronel Mario Méndez Mayedo, se refirió al movimiento migratorio de cubanos residentes en la Isla. Destacó que en 2019 hubo un incremento, dado que en el año viajaron al exterior 650 040 connacionales. “Estas personas viajan con diferentes objetivos y la mayoría retornan”, señaló.
Para 2020 ese número se redujo (271 061 salidas al extranjero), al igual que en el 2021 (243 590). En los años de actualización de la política migratoria –enfatizó Méndez Mayedo– han viajado 1 264 257 cubanos.
“Indiscutiblemente se han trastocado todos estos movimientos migratorios, hay cubanos que han quedado varados, aún no han regresado todos los cubanos que lo desean porque no hay suficientes vuelos o están muy caros los precios de los boletos”, destacó el coronel del MININT.
En cuanto al movimiento migratorio de cubanos residentes en el exterior, Méndez Mayedo comentó que en el 2019 viajaron a la Isla 346 381; para 2020 hubo un descenso (102 800) y en el 2021 solo viajaron a Cuba 30 509 cubanos, y la disminución se debe a los efectos de la COVID-19.
“En ocho años de actualización de política migratoria han venido al país 3 498 825”, aseveró y añadió que en el periodo se han reasentado en Cuba 60 655 cubanos, mientras que han adquirido la ciudadanía cubana 4 119.
La Mayor de las Antillas ha reiterado y defendido la migración regular, segura y ordenada. Foto: MININT
Movimientos migratorios complejos y actuar fraudulento
Por otro lado, Méndez Mayedo señaló que el tránsito irregular se refiere a personas que salen de Cuba legalmente, hacen asentamientos temporales en otros países con un tránsito por vía terrestre, aérea o marítima, lo cual afecta a terceros países.
El jefe de la Dirección de Identificación, Inmigración y Extranjería del MININT subrayó que las personas que realizan el tránsito irregular son víctimas de tráfico humano (extorsión, violaciones, secuestros y muertes): “Se da un fenómeno de presiones a familiares en Cuba y en los Estados Unidos para que paguen por la libertad de determinadas personas secuestradas”.
Asimismo, se refirió al empleo de documentación fraudulenta y ejemplificó que al cierre del 2021 se detectaron 459 personas con documentos falsos, tanto en Cuba como el exterior. “Estos documentos se elaboran fundamentalmente en Estados Unidos, no se hacen en Cuba”, señaló.
En la documentación fraudulenta –dijo el coronel– se emplean visas, residencias, permisos de trabajo y pasaportes de otros países, incluso boletos aéreos:
“El sábado pasado, 17 personas comprobaron, cuando fueron a chequear en su vuelo, que lo habían estafado, tenían boletos falsos por los cuales pagaron 3 500 dólares cada uno, son operaciones con un alto costo”.
Méndez Mayedo exhortó a desestimar cualquier gestión o trámite que se aleje de las formalidades legalmente establecidas, como aquellos que se realizan en los alrededores de embajadas y por personas no vinculadas oficialmente a estas, así como supuestas “facilidades”, “agilidad” en los trámites y “garantías” irreales.
Al referirse a las salidas ilegales, destacó que en el 2021 hubo una alta letalidad en reiterados naufragios, hay presencia eventual de menores, traumas psicológicos con secuelas de por vida, y alertó que las operaciones de tráfico más complejas son organizadas desde los Estados Unidos.
Durante el año 2021, las autoridades migratorias de otros países devolvieron a Cuba un total de 1 536 cubanos, procedentes de Estados Unidos (1 057), Bahamas (184), México (291) y Caimán (4).
Estados Unidos debería actuar con responsabilidad en el tema migratorio
Al final del programa televisivo, la subdirectora de la Dirección General de EE.UU. del MINREX, Johana Tablada, afirmó que “cada vez que Estados Unidos ha jugado políticamente con el tema migratorio se producen ciclos de salidas ilegales”.
En los últimos años –dijo la funcionaria– Estados Unidos no ha dado las 20 000 visas que establecen los acuerdos migratorios entre ambos países (negociados en 1984, 1994, y las declaraciones conjuntas de 1995 y 2017), y ha mantenido intactas políticas de presión dirigidas a hacer colapsar la economía cubana y a eliminar las fuentes de ingreso de la población, con el objetivo de lograr un cambio de régimen en la Isla.
“Está el contraste en cuál es la política que el gobierno de Estados Unidos tiene para los países del triángulo norte”, señaló y añadió que estas naciones son fuentes de migrantes por la frontera sur de Estados Unidos: “Ha habido declaraciones de Biden, de la vicepresidenta, de prácticamente toda la plana mayor del Departamento de Estado, convocatorias, conferencias de prensa privada, fondos millonarios para inversiones”.
Destacó que, mientras las autoridades estadounidenses hablan de apuntar a las causas profundas de los movimientos migratorios desde Centroamérica para poder enfrentar el fenómeno, actúan premeditadamente de manera diferente hacia Cuba.
“Ellos dicen que hay que ayudar al fin de la pobreza, a que mejoren las condiciones de vida y que hay que atacar las causas por las cuales una persona se ve forzada a emigrar a Estados Unidos. Esa filosofía se estrella completamente con la filosofía que los gobiernos de Trump y Biden han aplicado a la población cubana.
“Además de incumplir el otorgamiento de las visas, se ha visto un endurecimiento sin precedentes de las medidas unilaterales y coercitivas que hacen que nuestras vidas sean cada vez más difíciles”, subrayó.
El cierre consular en La Habana ha tenido un impacto directo en el cumplimiento de los acuerdos migratorios vigentes entre ambos países. Desde ese momento y durante cuatro años consecutivos (2018-2021) el gobierno de Estados Unidos no ha cumplido con su compromiso de garantizar un mínimo de 20 000 visas anuales. Se estima que fueron otorgadas alrededor de 4 000 visas para inmigrantes cubanos anualmente. Este incumplimiento, se convierte también en un incentivo a la migración irregular.
El obligatorio traslado de los cubanos hacia un tercer país para solicitar una visa, sin garantías de poder completar sus trámites o recibir respuesta positiva, encarece estos servicios y lleva a muchos cubanos a optar por vías ilegales o inseguras para poder ingresar a los Estados Unidos.
Johana Tablada remarcó que desde 2018, tras la llegada de Pompeo al Departamento de Estado, y de John Bolton y Mauricio Claver-Carone al Consejo de Seguridad Nacional, la administración Trump suspendió los diálogos bilaterales con Cuba sobre temas migratorios. El gobierno de Biden no ha reanudado estas conversaciones ni ha reabierto el consulado en Cuba.
La funcionaria de la Cancillería cubana destacó que todo el tiempo la política de Washington contra Cuba va dirigida a desestabilizar el país y a responsabilizarlo con las consecuencias que tienen esas medidas.
“No ha faltado la alerta, ni el uso de los canales diplomáticos, para trasladar al gobierno de Estados Unidos la importancia que tendría actuar con responsabilidad en este tema y volver a la mesa de conversaciones”, concluyó.