Los números de Cuba en su batalla contra la COVID-19 siguen siendo alentadores, con una tendencia decreciente que marcó este martes su punto más bajo de los últimos quince días: 17 casos confirmados. A ello se sumó la buena noticia de las 78 altas médicas en una sola jornada y el hecho de no lamentar más muerte por esta dura y engañosa enfermedad.
Ante ese escenario, que mantiene a la Mayor de las Antillas, dentro del modelo más favorable, el Gobierno cubano reiteró el llamado a no descuidar ni una sola de las medidas tomadas ante la pandemia que ya suma en el mundo más de 3 millones 467 mil casos, de ellos 1 685 en el territorio nacional.
En la sesión de este martes del grupo temporal de trabajo para la prevención y el control del nuevo coronavirus — que encabeza siempre el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, desde el Palacio de la Revolución — el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, alertó que “la confianza es un gran enemigo, por tanto tenemos que continuar con todas las medidas para el aislamiento social”.
Aun cuando estamos mejor, agregó, este es el momento crucial para continuar bajando los indicadores y para ello tenemos que seguir, con mucha disciplina, aplicando todas las medidas.
Sobre ese contexto en el que se mueve la Isla, el ministro de Salud Pública, José Angel Portal Miranda, informó que están ingresadas 5 mil 782 personas para la atención y vigilancia de la COVID-19, cifra que representa el 50% del día que más ingresados tuvimos, que fue el pasado 22 de abril.